domingo, 20 de febrero de 2011

La Gran Muñeca en la primera rueda 2011

La Gran Muñeca pisó por primera vez las tablas del Teatro de Verano en el concurso del 2011 con una gran presentación. Un desempeño esperado ya que el coro prometía cuarenta y cinco minutos de buena murga. Un coro con grandes individualidades que a lo largo del espectáculo se lucieron en solos, dúos y tríos.

 Las letras, al igual que el año pasado, están a cargo de Jimena Torres. La actriz sale en el conjunto en la cuerda de primos. Se destaca al momento de caracterizar a Lucía Topolansky en un cuplé que propone un secuestro express.

El espectáculo plantea que el Carnaval que estamos viviendo puede ser el último, tomando como fin del mundo al 2012. La murga vive cada función como si fuera la última y encuentra en cada manifestación del Universo, un motivo para que el mundo se termine. También expresa que el Carnaval es cada vez más competitivo y deja de lado su esencia de fiesta popular.

Se ve a una murga paranoica, con miedo al fin del mundo, pero sobretodo al fin del carnaval.

Al cierre del espectáculo La Gran Muñeca imagina cómo sería la vida sin Carnaval y propone vivir el día a día, disfrutar cada instante, ya que nunca se sabe cuál será el último. También propone tirar todos para el mismo lado y así salvarnos del final.

La musicalización está a cargo del cantautor Alejando Balbis quien supo salir en murgas como Contrafarsa y Falta y Resto.

Un espectáculo donde los coloridos trajes y maquillaje dan “vida” a los temas que tratan.

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